Ciento cincuenta Estados adoptaron por unanimidad una ambiciosa Declaración por la Cultura al término de la conferencia convocada por la UNESCO. El texto afirma que la cultura es un “bien público mundial” y marca una hoja de ruta común para reforzar las políticas públicas en este ámbito.
MONDIACULT 2022, la mayor conferencia mundial dedicada a la cultura en los últimos 40 años, reunió a casi 2.600 participantes durante tres días en Ciudad de México. 150 Estados respondieron a la invitación de la UNESCO y de México enviando delegaciones y 135 de ellos estuvieron representados al más alto nivel por sus ministros de Cultura.
En esta Declaración, resultado de diez meses de negociaciones multilaterales dirigidas por la UNESCO, los Estados afirman por primera vez que la cultura es un “bien público mundial”. Por ello, los Estados piden la integración de la cultura “como un objetivo específico por derecho propio” entre los próximos Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas.
El texto adoptado por los Estados define un conjunto de derechos culturales que deben ser tenidos en cuenta en las políticas públicas, que van desde los derechos sociales y económicos de los artistas, pasando por la libertad artística, hasta el derecho de las comunidades indígenas a salvaguardar y transmitir sus conocimientos ancestrales, y la protección y promoción del patrimonio cultural y natural.
También pide una regulación sustancial del sector digital, en particular de las grandes plataformas, en beneficio de la diversidad cultural en línea, la propiedad intelectual de los artistas y el acceso equitativo a los contenidos para todos.
En la Declaración, los gobiernos se comprometen a intensificar la lucha contra el tráfico ilícito de bienes culturales, con una mayor cooperación internacional en este ámbito. Asimismo, solicitan a los operadores del mercado del arte que no pongan a la venta objetos cuya procedencia no esté probada.
Este énfasis en los objetos “no probados” exige la protección de los yacimientos arqueológicos que siguen siendo vulnerables por no estar catalogados, con el fin de evitar las excavaciones ilegales y el saqueo. La Declaración pide a la UNESCO que apoye a los Estados en la aplicación de la legislación nacional existente para hacer frente a estos desafíos.
En este mismo ámbito, la directora general de la Organización, Audrey Azoulay, anunció la creación por parte de la UNESCO e INTERPOL de un museo virtual de bienes culturales robados. Será una herramienta educativa y pedagógica, para que los ciudadanos puedan conocer la historia de estas obras, y al mismo tiempo una herramienta de investigación para las personas que tengan dudas sobre el origen de un elemento. Se pondrá en marcha de aquí a 2025.
Entre otros logros de MONDIACULT figura la creación, a partir de 2025, de un Foro Mundial sobre Políticas Culturales, que la UNESCO organizará cada cuatro años. Los debates se nutrirán de un Informe Mundial sobre Políticas Culturales, elaborado por la Organización.
Según datos de la UNESCO, el sector cultural y creativo es uno de los motores de desarrollo más potentes del mundo. Supone más de 48 millones de puestos de trabajo en todo el mundo -casi la mitad de los cuales están ocupados por mujeres-, lo que representa el 6,2% de todos los empleos existentes y el 3,1% del PBI mundial. También es el sector que emplea y da oportunidades al mayor número de jóvenes menores de 30 años.
El texto completo de la Declaración adoptada en MONDIACULT 2022 puede leerse aquí.